Add parallel Print Page Options

21 pero se decían el uno al otro:

—Verdaderamente hemos pecado contra nuestro hermano, pues vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba y no lo escuchamos; por eso ha venido sobre nosotros esta angustia.

22 Entonces Rubén les respondió, diciendo:

—¿No os hablé yo y dije: “No pequéis contra el joven”? Pero no me escuchasteis; por eso ahora se nos demanda su sangre.

23 Ellos no sabían que José los entendía, porque éste tenía un intérprete para hablar con ellos.

Read full chapter